El pasivo es de 6.658 millones de pesos.
Fabián Doman, presidente de Independiente, trazó hoy un panorama sobre la situación del club, al que calificó como “tierra arrasada”, a poco más de un mes de ganar las elecciones en el club de Avellaneda y asumir sus funciones, con fuertes críticas a la gestión anterior que encabezaba Hugo Moyano.
Doman, acompañado por Néstor Grindetti, vicepresidente primero, y Juan Marconi, vice segundo, habló en rueda de prensa en el estadio del “Rojo”, y se refirió a “la preocupante situación por la atraviesa la institución”, según indicó al comenzar su informe.
El periodista y ex vocero de empresas de energía eléctrica subrayó entre “los principales problemas” las inhibiciones que pesan sobre el club: “El caso de Cecilio (Domínguez) no se puede repetir más”, destacó el nuevo presidente al mencionar el caso del volante ofensivo paraguayo por el que Independiente pagó casi 6 millones de dólares y vendió a menos de la mitad de esa cifra.
“Por (el mediocampista) Carlos Benavídez estamos buscando un plan de pago en cuotas con el club uruguayo (Defensor Sporting)”, añadió en referencia al incumplimiento de esos pagos, mientras que “por el caso de Gastón Silva estamos negociando con su madre”, tras el juicio por libertad de acción que entabló el lateral uruguayo.
Grindetti, actual intendente de Lanús por Cambiemos, también criticó la gestión de Moyano: “Mala praxis es lo mínimo que hubo acá. El pasivo es de 6.658 millones de pesos. Si no hiciéramos nada, habría que sumar 1.200 millones de pesos por el déficit mensual, pero vamos a trabajar para que eso no pase”, expresó.
“En jugadores solamente hay deudas por 11 millones de dólares y 800 mil euros. También hay 69 millones de pesos de deuda por premios individuales a los futbolistas y 230 millones de pesos otorgados en cheques. Y hay deudas con tres directores técnicos, Miguel Ángel Brindisi, Julio César Falcioni y Eduardo Domínguez”, concluyó.